ALERTA JUJUY – La investigación sobre Matías Jurado, el presunto asesino en serie de Jujuy, continúa arrojando detalles inquietantes. El fiscal regional Guillermo Beller reveló que la causa se ha extendido para analizar las relaciones familiares del acusado, así como los movimientos de sus tarjetas SUBE, un dato que podría ser fundamental para reconstruir su patrón de conducta antes de las desapariciones.
Según el fiscal, Jurado no mantenía contacto con sus ex parejas ni con sus hijos. «Entrevistamos a una expareja con la que tiene un hijo en común… no tenían contacto reciente. También entrevistamos a otra ex, anterior en el tiempo, con quien tuvo otros dos hijos, pero la falta de vínculo era todavía mayor», precisó Beller.
Seguimiento de la SUBE y un patrón sospechoso
Uno de los hallazgos más importantes de la investigación ha sido el seguimiento de las tarjetas SUBE encontradas en la casa de Jurado. Los registros de viajes mostraron un uso intensivo, especialmente los viernes, un detalle que coincide con la recolección de residuos en la zona. Esta coincidencia llevó a la fiscalía a sospechar que Jurado podría haber actuado los fines de semana, sabiendo que al día siguiente podía deshacerse de elementos.
El equipo de la fiscalía está analizando las cámaras de seguridad de la zona de la Vieja Terminal de Ómnibus, donde en al menos dos ocasiones Jurado descendió de un colectivo. Aunque no se ha logrado vincular directamente estos viajes con las desapariciones, los investigadores creen que esta línea de investigación podría ser clave para establecer nuevas conexiones.
Análisis psiquiátrico y antecedentes penales
Para profundizar en la mente del acusado, una psiquiatra del Ministerio Público de Salta se ha sumado a las pericias y ya mantuvo un primer encuentro con Jurado. El objetivo de este análisis es entender la motivación detrás de los crímenes.
Jurado fue detenido a finales de julio luego de que se encontraran restos óseos y elementos calcinados en su casa. El presunto criminal ya contaba con antecedentes penales, habiendo estado en prisión por robo y amenazas con arma. Su última condena fue de 3 años y 4 meses, y recuperó su libertad condicional en 2020. Actualmente, permanece en el penal de Gorriti imputado por homicidio agravado.